La relación entre el dolor de la ATM y lesiones de latigazo cervical se ha ganado mucha atención en los últimos años, y dos nuevos estudios ofrecen algo más de información sobre este problema.
El primer estudio examinó la relación entre la mecánica de accidentes y síntomas de la ATM en 219 pacientes después de accidentes de vehículos de motor (MVA). No es sorprendente que los investigadores encontraron que una mayor velocidad de las colisiones eran más propensos a resultar en problemas de la ATM que fueron menores las colisiones de velocidad. Sin embargo, también se encuentran los pacientes eran más propensos a tener dolor de la ATM si tuvieran su cabeza girada en cualquier dirección en el momento de la colisión, o si su vehículo fue golpeado por detrás. El estudio también señaló que un gran porcentaje de los pacientes la ATM son mujeres-un 89%. Inicio retrasado también fue un problema abordado: el 15% de los pacientes informaron de que los síntomas aparecieron un mes o más después de su accidente.
El segundo estudio, por el mismo equipo de investigadores, fue una evaluación de seguimiento de los pacientes que habían recibido tratamiento para el dolor de la ATM después de un MVA, pero que no había dejado de recibir tratamiento. 30 pacientes se les dio entrevistas telefónicas con respecto a sus síntomas actuales (en su caso), el tratamiento actual, las demandas actuales de seguros y litigios-un promedio de 52 meses después de su accidente.
El estudio encontró que el 73% de los pacientes tenían su reclamación de seguro o litigio resuelto en el momento de la entrevista, un promedio de 21 meses antes. Sin embargo, 23 pacientes (76,7%) informaron de que todavía tenía los síntomas de su lesión, y 8 (26,7%) sintieron que sus síntomas mandíbula interferido con sus actividades diarias. Sólo el 8 informaron que no tenían dolor en la mandíbula más, pero dos de ellos habían tenido algo de dolor desde el acuerdo o en los últimos 3 meses. Veintitrés pacientes (76,7%) informaron de que habían dolores de cabeza, y 25 (83,3%) declararon que en la actualidad había dolor en el cuello.
Cuando los pacientes fueron divididos en aquellos con los litigios en curso y las que se habían establecido, los investigadores no encontraron prácticamente ninguna diferencia entre los dos grupos en cuanto a los síntomas-de hecho, el grupo de pacientes con reclamaciones resueltas informó el dolor un poco más el cuello de las personas con litigios pendientes.
El primer estudio examinó la relación entre la mecánica de accidentes y síntomas de la ATM en 219 pacientes después de accidentes de vehículos de motor (MVA). No es sorprendente que los investigadores encontraron que una mayor velocidad de las colisiones eran más propensos a resultar en problemas de la ATM que fueron menores las colisiones de velocidad. Sin embargo, también se encuentran los pacientes eran más propensos a tener dolor de la ATM si tuvieran su cabeza girada en cualquier dirección en el momento de la colisión, o si su vehículo fue golpeado por detrás. El estudio también señaló que un gran porcentaje de los pacientes la ATM son mujeres-un 89%. Inicio retrasado también fue un problema abordado: el 15% de los pacientes informaron de que los síntomas aparecieron un mes o más después de su accidente.
El segundo estudio, por el mismo equipo de investigadores, fue una evaluación de seguimiento de los pacientes que habían recibido tratamiento para el dolor de la ATM después de un MVA, pero que no había dejado de recibir tratamiento. 30 pacientes se les dio entrevistas telefónicas con respecto a sus síntomas actuales (en su caso), el tratamiento actual, las demandas actuales de seguros y litigios-un promedio de 52 meses después de su accidente.
El estudio encontró que el 73% de los pacientes tenían su reclamación de seguro o litigio resuelto en el momento de la entrevista, un promedio de 21 meses antes. Sin embargo, 23 pacientes (76,7%) informaron de que todavía tenía los síntomas de su lesión, y 8 (26,7%) sintieron que sus síntomas mandíbula interferido con sus actividades diarias. Sólo el 8 informaron que no tenían dolor en la mandíbula más, pero dos de ellos habían tenido algo de dolor desde el acuerdo o en los últimos 3 meses. Veintitrés pacientes (76,7%) informaron de que habían dolores de cabeza, y 25 (83,3%) declararon que en la actualidad había dolor en el cuello.
Cuando los pacientes fueron divididos en aquellos con los litigios en curso y las que se habían establecido, los investigadores no encontraron prácticamente ninguna diferencia entre los dos grupos en cuanto a los síntomas-de hecho, el grupo de pacientes con reclamaciones resueltas informó el dolor un poco más el cuello de las personas con litigios pendientes.
